viernes, 22 de febrero de 2008

La alternativa de Rajoy


Echando la mirada atrás, desde las pasadas elecciones, me gustaría analizar la alternativa que los españoles han tenido y tienen en el Partido Popular.

Desde el primer día que ocuparon sus asientos en la oposición, tras el 14M de 2004, los populares no aportaron ni aportan una alternativa eficaz y responsable de gobierno. Al revés, se han dedicado a poner obstáculos en la acción política y de gobierno, oponiéndose a propuestas aprobadas por todos los partidos políticos como la Ley de Memoria Histórica, la retirada de las tropas de Irak, el proceso de pacificación en el País Vasco, las leyes sociales, etc. Es más, es ahora cuando han empezado a lanzar las únicas propuestas de la legislatura y claramente tienen un transfondo populista y electoralista.

El “NO” ha estado presente en sus continuas intervenciones en el Congreso, aderezado con una visión de un futuro apocalíptico de caos y destrucción. Así, hemos tenido que escuchar machaconamente que la unidad de España estaba en peligro [cuando ahora nos deleitan con el ¿quién ha dicho en el PP que España se rompía?]; que los terroristas marcaban la agenda de Zapatero [cuando es el momento de la Democracia en la que hay un mayor número de asesinos etarras en la cárcel]; que la familia iba a desaparecer [cuando no hay signos de poligamia en ningún matrimonio español]; que los asesinos del 11M no estaban en desiertos y montañas muy lejanas [cuando hay una sentencia en la que se ha desbaratado la teoría conspirativa de Aznar, Acebes, Zaplana, La Cope y El Mundo]; que la educación de la ciudadanía traía casi, casi la persecución de los religiosos [cuando la Iglesia sigue con sus privilegios en materia educativa]; que la economía española se encuentra peor que con el crack del 29 [cuando el paro y el crecimiento es hoy mayor que cuando Aznar dejó la Moncloa]; que España iba a ser un coladero de inmigrantes [cuando se ha llevado un proceso de regularización necesario y obligado en base a los derechos de las personas y que en Europa están empezando a tomar como modelo] … y así en múltiples cuestiones.

Junto a esta falta de propuestas está su manera de gobernar allí donde son alcaldes o presidentes de comunidades autónomas. La criminalización, el desprestigio, la mentira y el chanchulleo son las pautas que marcan la gestión de los populares. Casos tan recientes como el “guateque” de los funcionarios del Ayuntamiento de Madrid, las denuncias anónimas de Lamela con respecto al Severo Ochoa en Leganés o en lo más cercano, las irregulares concesiones de obras de la exConcejal de Latina del PP.

El resultado de estos cuatro años no es más que el asilamiento propio del PP y su enfrentamiento continuo con todas las fuerzas políticas y sociales. Y ahora, encima, cuando les abuchean, acusan a los socialistas de ser los responsables de la tensión y crispación. Sin justificar la violencia, hay un refrán que dice “quien siembra vientos, recoge tempestades”.

Es cierto que tampoco la gestión de Zapatero ha sido tan maravillosa como nos la ponen y que la única opción de voto es el PSOE. Pero lo que sí que creo es que la opción del PP es la de siempre; una derecha extrema encabezada por la marioneta “Rajoy” y dirigida por las caras de siempre, Acebes, Zaplana, Astarloa, Mayor Oreja, Trillo… y por supuesto, Aznar. Una derecha alejada de los ciudadanos y cercana a los poderes eclesiales y económicos.

Pero qué podemos esperar de un candidato que nos promete como primera medida - si gana las elecciones - de encargarse de precios, salarios y pensiones ... cuando fué incapaz como Ministro de afrontar los escandalosos redondeos con la llegada del euro.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todos juntos podermos vencer a estos indecentes. http://pensamientosdero.blogspot.com/